Última modificación: 2023-07-10
Resumen
Introducción: El conocimiento sobre audición espacial mayormente está orientado a situaciones estáticas, donde la fuente sonora y/o la persona están quietas. Existe relativamente poca evidencia sobre el rol de los movimientos en la estructuración del espacio sonoro.
Objetivo: Este trabajo busca estudiar el efecto de la escucha de sonidos generados a partir del movimiento exploratorio propio o de otra persona sobre la experiencia de estructuración del espacio sonoro.
Metodología: Se realizaron experiencias con 5 participantes que debían localizar fuentes sonoras ubicadas al frente suyo mientras usaban auriculares que modificaban su escucha. Se evaluaron las condiciones escucha propia vs escucha del otro, y condición estática vs dinámica. Se registró su respuesta de localización y se recabaron datos sobre su experiencia perceptiva a través de una entrevista semiestructurada.
Resultados: Los participantes tuvieron experiencias y rendimientos similares entre sí. Las condiciones estáticas, utilizadas como control, mostraron no provocar confusiones en las condiciones evaluadas. En todas las condiciones dinámicas los errores de localización fueron mayores y la experiencia de inestabilidad, como atribuir movimientos a la fuente sonora, fue común. Localizar una fuente sonora a través de los movimientos realizados por otra persona resultó fuertemente disruptivo. La posibilidad de autogenerar movimientos permitía al participante reducir la incertidumbre espacial.
Discusión: La manipulación de diferentes condiciones de escucha y movimiento evidenció el rol crítico de las claves sonoras dinámicas en la estructuración del entorno sonoro. Locallizar una fuente a partir de los movimientos realizados por un experimentador/ra desestructuran fuertemente el entorno sonoro. Condiciones más activas, como permitir a los participantes moverse, mejoran la experiencia perceptiva.