El Temperamento refiere a diferencias individuales, posee tres dimensiones: Extraversión, Afecto Negativo y Esfuerzo de Control, y contribuye al desarrollo cognitivo y emocional. La Regulación Emocional es la capacidad de monitorear, evaluar y modificar respuestas emocionales propias y la Motivación de Domicio es el impulso por dominar una actividad, incluyendo aspectos de persistencia y emocionales. El objetivo fue analizar la relación entre el Temperamento, la Motivación de Dominio y diferencias según Regulación Emocional de infantes de 18 a 36 meses de Buenos Aires. Se evaluó 61 infantes (M = 27,44 edad en meses; DS = 5,06; 54,1% niñas), con dos pruebas comportamentales del Regulación Emocional, la tarea del regalo y la tarea del retraso de la gratificación. Se utilizaron reportes parentales sobre el Temperamento y la Motivación de Dominio de los infantes mediante el Early Childhood Behavior Questionnaire (ECBQ-VSF; Gago Galvagno et al., 2021) y el Dimensions of Mastery Questionnaire (DMQ; Morgan et al., 2020). La Extraversión se asoció a mayor Motivación de Dominio, mayor disfrute en la realización de actividades, mayor perseverancia cognitiva, motriz y social hacia pares. Afecto Negativo se asoció positivamente con Reacciones Negativas. Mayor Esfuerzo de Control se asoció a menores Reacciones Negativas. El 40% no esperaron en la tarea del regalo y el 54,2% no espero en al menos uno de los tres intentos de la tarea del retraso de la gratificación. Se encontraron diferencias significativas entre los que esperaron en esta tarea, siendo que estos poseen menor Afecto Negativo y mayor Persistencia Cognitiva y Motriz. Estos resultados muestran la contribución de las diferencias individuales en el desarrollo de la Motivación y de la Regulación Emocional, siendo relevante para entender el desarrollo infantil. La Regulación Emocional, además se presenta asociada a la perseverancia, la predisposición a realizar intentos para aprender una habilidad cognitiva o motriz.